El pasado martes, 12 de abril, en el Hotel Astoria de Valencia, Maruja Torres (Barcelona, 1943) presentó su nueva novela ‘Fácil de matar’, editada por Planeta. Se trata de la primera incursión de la escritora barcelonesa – Medalla de Oro a las Bellas Artes (2006), Premio Planeta (2000) y Premio Nadal (2009), entre otros galardones – en la novela policíaca, también conocida como género negro. La obra narra el asesinato del hijo de una influyente familia libanesa al explosionar el coche donde viajaba. Dos son los sospechosos: la viuda, exuberante y ambiciosa, y el hermanísimo, heredero del imperio familiar. Sin embargo, en la versión oficial de los hechos hay algo que no termina de encajar. Para desembrollar este caso, Maruja Torres ha escogido a Diana Dial, “una periodista, divorciada, que vive gracias a la sustanciosa pensión, que le pasa su ex-marido, y que ha decidido dejar su profesión de periodista para dedicarse a la investigación de aquellos casos policiales que le apetezcan, sin hacerlo por dinero, ni por consagrarse como detective”. A pesar de lo que reza la aclaración preliminar del libro, donde se viene a afirmar que cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia, Maruja Torres afirmó que “Diana Dial es mi alter ego, aunque algunas cosas nos diferencian, por ejemplo que ella todavía salta de su cama, cosa que a mí no me ocurre ya, que duerme con una araña y que tiene algún que otro affaire amoroso, cosa que a mí tampoco me ocurre ya... Diana se desenvolverá como cualquier otro detective de los que deambulan por la novela negra mediterránea, con ese puntito especial que le aporta su amateurismo como investigadora”.
Este debut en el genero criminal es, en cierto modo, “una manera de continuar unida a Vázquez Montalbán, es más, si su mujer me lo permite, no me importaría resucitar en alguna de las próximas novelas a Pepe Carvalho y juntarlo con Diana Dial para ver qué surge”. El género negro es uno de los más aptos para transmitir la realidad social de cualquier país o territorio. Centrada en El Líbano, ‘Fácil de matar’ habla “de la corrupción urbanística, tan común en toda la cuenca del Mediterráneo y pone de relieve la baja consideración social de que gozan las mujeres que trabajan en aquel país, que es muy moderno para las piscinas, discotecas y pistas de tenis y para pocas cosas más”.
‘Fácil de matar’ significa pasar página para Maruja Torres, “es mi despedida del Líbano, un país que abandoné en el año 2010, después de una noche loca que viví con un grupo de amigos en una pensión esotérica delante de la Esfinge. Decidí que me iba de allí antes de que me echasen. Aquel no era mi Líbano, lo estaban destrozando, se había convertido en un estado que ha experimentado una gran expansión inmobiliaria, repleto de restaurantes japoneses, excavadoras, edificios inteligentes, al mismo tiempo que cuatrocientos mil palestinos malviven refugiados en los campos. Además iban a cerrar El Café de los Espejos, mi local favorito. De hecho, ya no existe, ahora es un fast food”.También es su despedida del periodismo: “voy a continuar en el periodismo como lectora, espectadora y con mis colaboraciones, pero tengo una edad que no puedo seguir in situ ningún conflicto. Ya no tengo ni la agilidad ni las fuerzas necesarias para eso”.
Las aventuras detectivescas de Diana Dial tienen vocación de serie. De hecho, Maruja Torres ha pensado que su próxima entrega “tratará del Egipto previo a la revolución anti Mubarak, de la corrupción y de la desaparición de objetos históricos de los museos, un tiempo y un país que conozco muy bien. Nunca me he podido explicar cómo aquella gente podía soportar tanta pobreza. Todo lo que allí ha pasado ha sido algo inesperado y ya veremos cómo termina”. Diana Dial nace también con hambre viajera y no se limitará a trabajar en un solo lugar. “Ella no se detendrá en El Líbano o en Egipto y visitará otras ciudades, incluidas las de Francia y España, de las que puedo hablar con fundamento”.
Por último, la escritora barcelonesa se mostró entusiasmada con las nuevas tecnologías, “ojalá abra las mentes, sobre todo las de las mujeres, a ver si la mujer se pone a pensar no sólo en términos domésticos sino también sociales”. Y con su blog “me he volcado en el mundo del blog. Me gusta mucho poner links de la gente que me inspira confianza, colgar comentarios sobre la actualidad y reservar un rincón para mi sección de cine. Creo que nos tenemos que acostumbrar a este medio de comunicación, porque se nos viene encima una sequía de papel tremenda”.