Hace apenas unos días, Editorial
Planeta ha publicado una nueva edición de ‘El código Da Vinci’, adaptada para los
lectores que se incorporan a las lecturas de adultos por el propio Dan Brown (1964,
Exeter, Nuevo Hampshire, Estados Unidos). El escritor norteamericano ha
revisado el texto para hacerlo más accesible al público que se inicia en la
literatura para adultos. La nueva edición contiene fotografías de cuadros,
escenarios en los que se desarrolla la acción e incluso ilustraciones de los
códigos y secretos que los protagonistas han de resolver a lo largo de la
trama. Una novedad con respecto a la primera edición, la del año 2003, es que
el texto contiene una decena de enigmas ocultos que ponen a prueba el ingenio
de los lectores.
Es el propio Dan Brown quien
escribe el prólogo donde explica la atracción que siempre ha sentido por los códigos
y los secretos. Todo comenzó en un día de Navidad, donde Brown encontró en el
árbol y junto a los regalos un mensaje de sus padres, escrito con extraños símbolos
que no tardó en descifrar. «Desde esa mañana – dice el estadounidense – me fascinan
los códigos, esos mensajes secretos que hay que desentrañar para poder
entenderlos».
‘El código Da Vinci’ combina los
géneros de suspense detectivesco y esoterismo de la New Age, con una teoría de
conspiración relativa al Santo Grial y al papel desempeñado por María Magdalena
en los primeros tiempos del cristianismo. En su momento, la aparición de la
novela despertó un enorme revuelo al tiempo que espoleó el difundido interés,
especialmente en territorio estadounidense, por ciertas teorías de complots
urdidos por poderes ocultos, un término que el propio Dan Brown definió como «el
auge conspiracionista»
Muchos lectores y críticos han
tachado ‘El código Da Vinci’ de libro mentiroso, olvidando que lo que tenemos
entre nuestras manos es una novela, y una novela, por definición, es una narración
en prosa, generalmente extensa, que cuenta una historia de ficción o con un
desarrollo más completo en cuanto al argumento y los personajes, que los
relatos breves o cuentos. Es decir, la novela es el género de la ficción por
antonomasia y en su interior caben tanto hechos ciertos y probados como puras
invenciones imaginativas. De hecho, dentro de la llamada novela histórica, territorio
que bordea ‘El código Da Vinci’ en la categoría de thriller, los mayores logros
se obtienen cuando el ensamblaje entre realidad y ficción es acertado, sin que
se noten las costuras utilizadas para pergeñar la historia. En este sentido,
uno de los grandes aciertos de la novela de Brown es la gran cantidad de
capítulos que tiene, ochenta y tres y un epílogo, todos ellos de una extensión
más bien corta, que oscila entre tres y seis páginas, lo que otorga a la lectura del
libro un gran dinamismo y proporciona al lector las dosis de tensión adecuadas
para mantener su atención.
‘El código Da Vinci’ es una de
las novelas más leídas de todos los tiempos, con más de ochenta y dos millones
de ejemplares vendidos en el mundo. Su publicación marcó un antes y un después
en el panorama literario y se convirtió en una obra universal. Su adaptación a
la gran pantalla, protagonizada por Tom Hanks, fue un gran éxito de taquilla,
con una recaudación cercana a los ochocientos millones de dólares. Y aunque es
suficientemente conocido, no está demás explicar que ‘El código Da Vinci’
cuenta los intentos del profesor de Iconografía Religiosa de la Universidad de
Harvard, Robert Langdon, para resolver el misterioso asesinato de Jacques
Saunière, comisario del Museo del Louvre, que aparece muerto en el ala Denon
del propio museo, en la postura del Hombre de Vitruvio, de acuerdo con el
dibujo realizado por Leonardo da Vinci, con un mensaje críptico escrito a su
costado y un pentáculo dibujado en el pecho con su propia sangre. Langdon y la
agente francesa Sophie Neveu tratarán de aclarar el misterio que envuelve este crimen,
lo que les conducirá a analizar obras de arte como la Mona Lisa. El principal
conflicto que presenta la novela radica alrededor de dos misterios: descubrir
al asesino y conocer el secreto que intentaba proteger Saunière. En medio de
esta investigación, los protagonistas se las verán con una misteriosa sociedad
secreta, el Priorato de Sión, así como con los Caballeros Templarios y el Opus
Dei.
Además de ‘El código Da Vinci’,
Dan Brown es el autor de las novelas ‘Inferno’, ‘El símbolo perdido’, ‘Ángeles y
demonios’, ‘La conspiración’ y ‘La fortaleza digital’. En la actualidad, reside
en Nueva Inglaterra con su esposa. Es licenciado del Amherse College y de la
Phillips Exeter Academy, donde fue profesor antes de dedicarse a la escritura
en exclusiva.