Ocurrió durante la I edición del
Golem Fest celebrado en Valencia a comienzos del pasado mes de diciembre. Por
uno de tantos azares de la existencia, cayó en mi poder un libro especial,
atractivo, de bello formato y mejor maquetación, distinto, ilustrado además. Su
título era, es, Frankenstein resuturado’, editado por Alrevés.
‘Frankenstein resuturado’ es el
resultado del proyecto imaginado y diseñado por el inquieto escritor e inventor
de conceptos culturales Fernando Marías quien, al cumplirse en el año 2018 el
II centenario de la publicación por vez primera de la célebre novela
‘Frankenstein o el moderno Prometeo’ de la escritora británica Mary Shelley
(Somers Town, 1797 – Chester Square 1851) tuvo la ocurrencia, feliz ocurrencia,
de trabajar en un libro que conmemorara esta epifanía. Concibió la idea tras
tropezarse con «un viejo solitario acodado en la barra de un bar del centro de
Madrid», que tenía unas manazas rojas y un activo lagrimal y que, por algún
motivo, le llevó a imaginar que si la criatura creada por Frankenstein viviese
hoy «tendría el aspecto de este viejo» y que estaría bien conocer cómo habría
sido su existencia si su vida se hubiera prolongado durante veinte décadas.
Además de una introducción,
escrita por el propio Marías y en la que explica la génesis del proyecto, el
volumen contiene una nueva traducción de la novela de Shelley, encargada al
escritor Lorenzo Luengo, «sólido novelista y meticuloso traductor», en palabras
del diseñador del proyecto, que cuenta en su currículum, entre otros galardones
y títulos publicados, con el Premio Ateneo de Sevilla 2013 por su novela ‘La
cuestión Dante’. Antes de la traducción propiamente dicha, Luengo elabora un
estudio donde explica la azarosa publicación del texto original y razona los
parámetros por los que se ha regido para elaborar su traducción.
Tras todo esto y como no podía
ser de otro modo, a lo largo de más de trescientas páginas, llega este nuevo
‘Frankenstein o el moderno Prometeo’. Si nos aproximamos a su lectura,
enseguida nos daremos cuenta de que la novela, aunque sin duda pertenece al
género fantástico, tiene poco que ver con ese terror que tantas veces nos han
comentado o hemos contemplado en el cine y en la pequeña pantalla sobre el
monstruo de Víctor Frankenstein, a la vez que descubrimos la sensación trágica
y amarga de la soledad de un individuo, único en su especie, el rechazo que su
presencia inspira en los seres humanos y también su desdichado destino. La
novela de Shelley, aparentemente, se cierra de manera definitiva, pero en
verdad esconde un final abierto, proclive a múltiples interpretaciones y
posibles secuelas. Precisamente es ahí donde Fernando Marías ha profundizado
para asentar su proyecto y donde brotó su idea de que veinte reconocidos
escritores (Julio César Iglesias, Yolanda Castaño, Juan Jacinto Muñoz Rengel,
Valeria Correa Fiz, Eva Díaz Riobello, Matías Candeira, Milagros Frías, Vanessa
Montfort, Ricard Ruiz Garzón, Elisa Victoria, Irene Gracia, Patricia Esteban
Erlés, Juan Ramón Biedma, Elia Barceló, Clara Peñalver, Espido Freire, María
Zaragoza, Ismael Martínez Biurrun, Miguel Ángel Hernández, Raquel Lanseros y Aixa
de la Cruz), utilizando la fórmula del relato corto, imaginaran cómo hubiera
sido la continuación de la vida de Frankenstein, dividiendo los doscientos años
transcurridos desde el momento de su publicación en veinte décadas, de tal
manera que los autores han trabajado sus cuentos ciñéndose al periodo que les
asignó Marías y obteniendo resultados altamente interesantes.
Cada uno de esos veinte cuentos
viene aparejado y precedido por un dibujo a modo de portada, realizado por
ilustradores de primer nivel: Juan Miguel Aguilera, Tyto Alba, Raquel Alzate,
Raquel Aparicio, Laia Arqueros, Raúlo Cáceres, Irene García, Raquel Lagartos,
MBRichart, Miriampersand, Sara Morante, Elena Odriozola, Javier Olivares,
Mireia Pérez, Joaquín Pertierra, Dídac Pla, Pedro Rodríguez, Carlos Rodríguez
Casado, Santiago Sequeiros, Carlos Spottorno y Fernando Vicente.
Pero aún resta una sorpresa, ya
que casi como un remate, el libro incluye un tema musical, ‘Balada para
Frankenstein resuturado’, escrita por Josete Ordóñez, ayudado por el ingeniero
de sonido Luca Germini y los músicos Rosa Masip e Iñaki Quijano.
No se puede pedir más: una buena
novela, clásica, con nueva traducción, veinte relatos inéditos, veinte dibujos
espléndidos y un tema musical singularmente atractivo. Ahora sólo resta
sumergirse en la lectura y disfrutar, sean o no amantes del género de la
literatura fantástica.