Hace muchos años escribí un relato policíaco desarrollado en esta relojería y que se publicó en la antología de relatos 'Valencia Criminal' en 2010, editada por El Full. Todo lo que en ella sucedía, personajes incluidos, era producto de la imaginación, pura ficción. Jamás supe porqué elegí este escenario, salió por sí solo, como suelen suceder este tipo de ocurrencias. Ayer por la tarde, al pasar ante su fachada, descubrí que el dueño se jubila y que el establecimiento cierra. Así que, por lo menos, una fotografía para el recuerdo de otro trozo de Valencia, que pronto desaparecerá para cambiar de imagen.