«Desde su agujero de arcilla escuchó el eco de las voces que lo llamaban y, como si de grillos se tratara, intentó ubicar a cada hombre dentro de los límites del olivar» (Jesús Carrasco, Intemperie)

domingo, 26 de febrero de 2017

Gonzalo Canedo, editor

La noticia publicada el 16 de enero de 2013 en el diario El País, referida al fallecimiento y personalidad del editor Gonzalo Canedo, es interesante para complementar la entrevista de Iván Repila. 

Iván Repila: «Me fascina que una misma metáfora pueda sugerir cosas distintas en cada persona»

Nº 502.- Valencia brilla. Casi como en tarde fallera. Tengo el tiempo justo. Y la agenda apretada. Combino caminata ligera con transporte urbano. Línea 5, «Interior». El bus se detiene en la parada del IVAM. Me bajo. En la terraza, sentado a una mesa, un tipo joven, solo, delgado, con barba. Nadie más. No estoy seguro de que sea el escritor con quien quedé citado. Así que mejor me acerco y pregunto. «Iván». Responde: «Sí, soy yo». Se pone en pie. Apretón de manos. «¿Tomas algo?», pregunta. «Un cortado. Descafeinado. De máquina», respondo antes de que se vaya a por él. Iván Repila es el autor de ‘Prólogo para una guerra’, editada por Seix Barral, la novela que cuenta la historia del prestigioso arquitecto Emil Zarco a quien han encargado un proyecto urbanístico donde podrá exponer sus ideas sobre la esencia y el destino de los hombres, una larga estirpe que debe progresar y perpetuar los grandes logros de sus antepasados. En la misma ciudad, otro hombre, el Mudo, viaja en sentido contrario, pretende la desaparición, la ruptura con una sociedad que no le corresponde. El Mudo no quiere compañía. No habla. Ambos personajes están heridos: uno por la imposibilidad de realizarse; el otro, por una pérdida irreversible. Iván regresa con el descafeinado de máquina. Se sienta. Prende un pitillo. El humo se eleva, engullido por el aire. Preparo la grabadora. Pulso la tecla rec. Compruebo que funciona. Piloto rojo encendido. Comenzamos la conversación.
Iván, es la primera vez que te entrevisto y esta pregunta es casi obligatoria: ¿qué significa o qué es para ti la escritura?
Uff, podría responderte con tópicos u otras cosas, pero en verdad yo diría que es la actividad con la que mejor me lo paso.
Hasta ahora solo has publicado novelas, ¿no te tientan los cuentos?
Es verdad, cuando era un chaval hice cuentos, pero fueron pocos y todos tenían vocación de novela. Ahora he escrito algunos más, pero por encargo. Es un género que ni lo odio, ni lo admiro, pero me va mejor la distancia larga. Lo mío creo que es la escritura de aliento prolongado.

martes, 21 de febrero de 2017

Ramón Pernas: «No hay nada más mágico que lo real y más real que lo mágico»

Nº 501.- Ramón Pernas dice de sí mismo que gusta «del viaje y de las ciudades donde habita la nostalgia. Soy fiel a Italia y sufro el síndrome de Estocolmo cuando frecuento las ciudades del norte de Europa. Amo los buenos vinos, soy cinéfilo melancólico y creo firmemente en el poder sanador de los libros, de todos los libros». Con motivo de la publicación de su nueva novela, ‘El libro de Jonás’, en palabras de su autor «una narración agridulce y sentimental», delicadamente literaria y evocadora basada en las voces de sus protagonistas, que llegan desde su infancia en un pueblo gallego costero, Vilaponte, hasta el comienzo de su ancianidad, momento clave para reencontrarse con los niños que fueron y hacerse por fin los favores que se deben, Ramón Pernas se acercó por Valencia y en el Colmado Rivera, salpicados por la potente música ambiental y el murmullo, no menos potente, de una cafetera exprés, pudimos conversar durante unos minutos sobre su novela.
Ramón, ¿cómo surgió la idea para escribir ‘El libro de Jonás’?
Viajo con frecuencia a Vilaponte, allí veo la sombra de todo lo que fuimos y recupero amigos que fueron mis compañeros de juegos infantiles, aunque echo de menos al que soñó conjuntamente su futuro y se escalabró, al que emigró e incluso a quien ha muerto. Así que me conjuré conmigo mismo para devolverles parte de su memoria sentimental. Para eso me apropié de un suceso, no sé si cierto o no, el de la varilla de un paraguas que impactó en el ojo de Justo Pastor, que rodó por el suelo y se convirtió en un ojo que veía más allá y fue enterrado dentro de una caja llena de orujo, sobre la que floreció un almendro. En la novela, la visión tiene mucha importancia porque, además de este episodio, uno de los protagonistas es un sastre ciego.

domingo, 19 de febrero de 2017

500 entrevistas

500 entrevistas


Con la entrevista realizada a la escritora Care Santos, Premio Nadal 2017, El Eco de las Voces ha alcanzado las quinientas entrevistas publicadas. 

Gracias a todos por vuestra paciencia lectora.

Care Santos, ganadora del Premio Nadal 2017: «Me parecía necesario homenajear a unas mujeres educadas bajo el franquismo, en una sociedad retrógrada, católica por imposición y machista»

La escritora catalana Care Santos acaba de ganar el Premio Nadal con ‘Media vida’, editada por Destino, una novela en la que, a través de las vidas de cinco amigas a lo largo de treinta años, retrata a una generación de mujeres que tuvieron que construir sus destinos en la España de la Dictadura y la Transición, en un momento en que la hipocresía de aquellos que querían mantener las formas a cualquier precio se enfrentó con nuevas miradas sobre la amistad, el amor y la libertad. ‘Media vida’ es un relato sobre el peso de la culpa, la importancia del perdón y sobre cómo nos afecta el paso del tiempo. ‘Media vida’ es una novela que atrapa al lector sin soltarle hasta el punto final de la página cuatrocientos ocho, la última, obviamente.
Ante todo, Care, enhorabuena por el Premio Nadal. Como escritora, ¿ganar el Premio Nadal, que es el más antiguo de todo el estado español, tiene un atractivo especial que no poseen otros concursos literarios?
Desde luego que sí. Es un premio con el que sueña todo el que se considera escritor, aunque presentarse es un gran atrevimiento. Por eso ganarlo reporta tanta felicidad.
Por cierto, presentaste la novela con el seudónimo de Julia Salas, el nombre de una de las protagonistas, ¿cómo se te ocurrió?
Me gusta utilizar nombres de mis propios personajes, como si fueran amuletos. De algún modo, cuando termino una novela son tan queridos para mí que utilizar sus nombres es un modo de tenerlos cerca por más tiempo.
Para ti, ¿este premio es importante por el dinero, por el reconocimiento de los miembros del jurado o porque todavía te hace más visible entre los lectores?
La dotación económica del Premio Nadal es insignificante en comparación con otros premios de su categoría. No creo que nadie se presente al Nadal por el dinero, sino por otro tipo de premio -mucho más importante-: los lectores. Haber ganado este premio me permitirá acercarme a un grupo numeroso de lectores que nunca antes me habían leído y que más que probablemente no lo habrían hecho sin la garantía del premio. Ese es el auténtico galardón, para alguien que escribe desde que tiene uso de razón.

miércoles, 15 de febrero de 2017

Álvaro Pons, escritor, articulista, crítico y proselitista de cómics: «Hay que valorar cada tebeo en su época y contextualizar»

Le entrevisté por primera vez hace casi nueve años. Entonces fue una gozada hablar durante media hora con una persona que entiende y conoce al dedillo la historia del cómic nacional y de importación.  Alguien que, además, goza de una muy buena memoria para el recuerdo y el detalle preciso. Les hablo de Álvaro Pons (Barcelona, 1966), profesor y vicedecano universitario, crítico, articulista, escritor y, sobre todo, lector de tebeos. Más de tres mil días después vuelvo a sentarme a su lado para ver cuál ha sido la evolución del cómic desde 2008. Es sábado, luce un sol que el día anterior fue lluvia, y la cafetería del Hotel Plaza Parque Central de Valencia, con el fondo de la Pantera Rosa y la plaza Manuel Sanchis Guarner en obras, es un escenario tan bueno como cualquier otro para escucharle. Y en esta ocasión, la conversación duró una hora que pareció no tener sesenta minutos, porque los segundos se desgranaron silenciosos, raudos y sin avisar. No hay nada como una charla interesante para que el tiempo avance contra reloj.

Álvaro, trabajas en la universidad, ejerces de padrazo, ¿de dónde sacas tiempo para leer y comentar tanto tebeo?
Tengo la suerte de que dispongo de un horario muy bueno y soy muy disciplinado. Es verdad que la facultad me ocupa mucho tiempo, porque además de las clases soy vicedecano y ando metido en diversas historias, pero aún así me permite compaginar la vida familiar y laboral con la lectura. Excepto los tres primeros años de la vida de mi hijo, en que dejé de hacerlo, cada noche leo un tebeo completo y no me acuesto sin acabarlo.
Supongo que empezarías a leer cómics muy pronto…
Empecé a leer antes de ir a la escuela. Mi primer recuerdo aparece hacia finales de los años sesenta, con los tebeos de Dumbo, cuando me veo pidiéndole a mi padre que me enseñara qué es lo que decían las palabras de las viñetas. Así que, cuando entré en párvulos, ya sabía leer. Si saco cuentas, llevo más de cuarenta y cinco año leyendo.

lunes, 6 de febrero de 2017

Alberto Urdiales Márquez, exjugador y comentarista televisivo: «En el balonmano he tocado todos los palos»



Desde el pasado 16 de enero y hasta el 29 del mismo mes, en diversas ciudades de Francia se desarrolló una nueva edición del Campeonato del Mundo de Balonmano, la XXV, que, una vez más, y ya van seis, ha conquistado Francia. El Campeonato, afortunadamente, ha sido cubierto con gran amplitud por la cadena Teledeporte y, durante las retransmisiones, además de la habitual voz de Francisco Caro, los teleadictos al balonmano, hemos podido disfrutar con los comentarios y los análisis técnicos de Alberto Urdiales, santanderino, laureado exjugador internacional, campeón de Europa de clubs y medallista olímpico, con el que pude repasar aspectos del deporte del cuarenta por veinte, a lo largo de la charla que mantuvimos una vez concluido el torneo.
Alberto, ¿qué ha significado o qué significa en tu vida el balonmano?
Comenzó siendo un hobby, pero al final se ha convertido en mi forma de vivir. Comencé de chaval y terminé como jugador profesional. Fui presidente de la Federación Territorial Cántabra y ahora trabajo en la Federación Española. Desde hace mucho tiempo toda mi vida ha girado en torno al balonmano.
¿Había antecedentes balonmanistas en tu familia?
No, mi padre, fue jugador de fútbol profesional, pero mis cinco hermanos y yo nos hemos dedicado a jugar al balonmano. Cosas que pasan.
Jugabas de extremo derecho y eres zurdo, ¿en el balonmano ser zurdo es una ventaja?
Sin duda que sí,  porque juegas en un lado del campo que no es el más habitual y a la hora de lanzar desde el puesto de extremo derecho, indudablemente, es una gran ventaja.
Tú eras un especialista en el lanzamiento de los siete metros, ¿ser lanzador de penalties es un reto o tiene algo de inconsciencia?
Bueno, en el fondo esto no es más que un duelo entre el lanzador y el portero, un mano a mano, en el que al final influyen factores como la técnica y la calidad de los duelistas.
Perteneciste a tres grandes clubes, Atlético de Madrid, C.Bm. Cantabria Teka y Portland San Antonio, con los que conseguiste títulos importantes, defínelos brevemente.
El Atlético de Madrid lo representaba todo: tradición, historia, clase y títulos; el Teka fue un club creado a base de dinero en un momento determinado; y el Portland se forjó con jugadores de gran experiencia.
¿Cuáles fueron los entrenadores claves en tu carrera como jugador?
Uff, hubo muchos que, a lo largo del tiempo, ayudaron en mi formación y fueron fundamentales. Sin embargo, creo que Jordi Álvaro, Juan de Dios Román y Julián Ruiz son los que más me marcaron a lo largo de mi trayectoria.
Fuiste medalla de bronce con España en los JJ. OO. de los años 1996 y 2000, ¿para un jugador de balonmano participar en una olimpiada es el súmmum?
Efectivamente, jugar una olimpiada es lo máximo no sólo para cualquier jugador de balonmano, sino para cualquier deportista. La suerte que yo tuve es que acudí a tres olimpiadas y conseguí dos medallas de bronce, lo que supone un magnífico colofón para cualquier participante en unos juegos.
¿Son más importantes para ti estos dos bronces que la Copa de Europa que conseguiste en la temporada 1993-1994 con el Teka Cantabria?
Sí, evidentemente, y más para nosotros, que fuimos los primeros que conseguimos una medalla con la Selección Española en el Campeonato de Europa de 1996. Se fueron juntando muchas cosas en este éxito y lo convirtieron en un hito muy especial.

domingo, 5 de febrero de 2017

A veces te ataca la nostalgia

A veces te ataca la nostalgia y de vez en cuanto te apetece recordar algo que formó parte de tu vida infantil o adolescente. Si además, el recuerdo es divertido, humorístico, mucho mejor. 

Así que aquí les dejó el vídeo de un episodio de La pantera rosa, que en esta ocasión se las tiene tiesas con un reloj de Cucu. No recuerdo ni la fecha en que se emitió, ni en la que se rodó, pero indudablemente se ha conservado bien y con toda su frescura. 

jueves, 2 de febrero de 2017

Miguel Ángel Muñoz: «El lector lee de acuerdo con la música que le llega desde el libro»

Miguel Ángel Muñoz llegó a Valencia para presentar en la Librería Ramon Llull de la calle de la Corona, su último libro de relatos, ‘Entre malvados’,  publicado por Páginas de Espuma, un retrato poliédrico, troceado en diez segmentos, acerca del miedo y la violencia que, como señala la contraportada, nos rodea y acobarda, temerosos como estamos de todo lo que pueda ocurrirnos a nosotros y a quienes queremos. Este es su tercer libro de relatos y por sus páginas desfilan historias de un realismo bien cruel, que tienen como protagonista desde el yihadismo del 11-M hasta el terror fantástico y legendario. Nuestra conversación tuvo lugar en la propia librería, mientras en la calle se rompía el cielo y comenzaba una lluvia tenaz, que invitaba al refugio bajo los tejadillos de las antiguas casas, algunas ya remozadas, del Barrio del Carmen.
La primera pregunta es obligada, Miguel Ángel, ¿qué significa para ti la escritura?
Te diría que para mí la escritura casi es una forma de relacionarme con la vida. Desde niño tuve claro que quería ser escritor y escribir es la manera que tengo de entender el mundo.
Publicas novelas y cuentos, ¿te sientes más a gusto en alguno de estos dos géneros o hay un tiempo para cada uno?
Aunque donde más repercusión he tenido es en el cuento, he de confesar que me atraen igualmente uno y otro. No soy de los que defiende el cuento a capa y espada, porque cada género tiene sus complicaciones y los trabajo con el mismo interés, tanto como lector que como escritor. Hasta hoy y de modo casi involuntario, los he ido alternando, porque me parece sano variar y porque para crear necesito el estímulo nuevo que me proporciona ese cambio de registro.