Herme Cerezo / SIGLO XXI, 22/07/09
El verano se antoja época propicia para disfrutar del aire libre. Salir en bicicleta, solo o en compañía de un grupo de amigos, para recorrer los alrededores de cualquier pueblo o paraje es una actividad plenamente válida y satisfactoria para cualquier ser humano. De hecho, cada vez más, nuestras carreteras y caminos vecinales se pueblan con hombres y mujeres que, aupados al sillín, pedalean a ritmo moderado entre animada charla para visitar tal o cual ermita, tal o cual rincón perdido de la geografía española. Francisco González es un ciclista valenciano en el que ha prendido con fuerza esta afición. Y así, publicado por Carena Editores, ha sacado al mercado un libro interesante en el que ha invertido más de seis meses de trabajo, una especie de manual para no iniciados en el mundo del cicloturismo, que lleva por título ’20 rutas en bici de Valencia a Valencia’.
Francisco, ¿este es un libro para todo el mundo?
Sin duda que sí, para jóvenes, adultos, jubilados, amigos, padres, hijos, para cualquiera en suma. Es un libro que tiene múltiples aplicaciones: pasar un día agradable, salir a merendar o comer con la familia, relacionarse con los amigos ... En realidad, cualquier motivación es buena para utilizarlo.
¿Para ciclistas experimentados también?
Los ciclistas experimentados trazan sus propias rutas. Este es un libro fundamentalmente de iniciación, que busca crear nuevos aficionados al mundo de la bicicleta.
¿Qué metodología has seguido para escribirlo?
La mayoría de rutas ya las conocía de antemano, así que lo único que he tenido que hacer es tirar de memoria y, ayudado por un gps, plasmar en los mapas todas las referencias necesarias. Después he recorrido cada ruta para comprobar que todo estaba en su sitio.
¿Todas las rutas comunican Valencia capital con poblaciones del extrarradio?
Efectivamente, todas las rutas comunican Valencia con sus alrededores excepto una que, partiendo de San Isidro y bordeando Quart de Poblet y Alaquàs, traza un viaje completo por toda la periferia de la capital.
¿Has seguido algún criterio particular para trazar estas rutas?
No, a pesar de que están muy trillados, fundamentalmente trataba de descubrir territorios nuevos. He navegado por Internet para conocer qué alternativas me ofrecía cada uno de los puntos que deseaba visitar, porque hay lugares que muestran muchos aspectos interesantes y otros únicamente la belleza del paisaje, que no es poco.
¿Qué tipo de bicicleta es la adecuada para recorrer estas rutas?
Cualquier bicicleta que no sea de rueda fina sirve para recorrerlas.
Tú vives en Valencia, ¿la capital del Turia es apta para circular en bicicleta por sus calles?
Actualmente no del todo, pero poco a poco va mejorando. Comparada con otras capitales apenas si estamos comenzando. En países como Holanda o Alemania hay carriles bici en todas las ciudades. Incluso los medios de transporte están adaptados para llevar bicicletas en su interior.
¿Nuestras calles facilitan la convivencia entre bicicletas y coches?
Dentro de la propia ciudad esta convivencia es difícil. Lo que hay que hacer es aprovechar el coche para sacar la bicicleta fuera del casco urbano y entonces extraerle el máximo partido.
Y ¿cómo es la relación entre peatones y ciclistas?
En general, la relación es exactamente igual que la que mantienen los conductores de automóviles y los ciclistas, es decir, no muy buena porque ninguno de los dos mira por el otro. Los peatones no respetan el carril bici y los ciclistas algunos lo respetan y otros van como locos. Hay de todo.
Para manejar una bicicleta en un entorno urbano, ¿un ciclista no debería, al menos, haber superado el examen teórico del Código de la Circulación?
Mira, cada medio de transporte tiene su velocidad propia. Si a un ciclista que va a su marcha le obligan a detenerse en un semáforo, no lo asimila y asume el riesgo de cruzar en rojo, aún sin olvidar que su propio cuerpo es la carrocería. Por eso en mi libro, las rutas sólo toman la ciudad de Valencia como punto de partida.
Una última pregunta: antes de recorrer cualquiera de las rutas que propones en el libro, ¿qué recomendaciones les darías a los que decidan salir a pedalear?
Siempre recomiendo lo mismo: llevar agua, especialmente abundante en el verano, hinchador, parches de repuesto, cámara, casco y un kit de herramientas para superar cualquier imprevisto.
Pues ya lo saben, ’20 rutas en bici de Valencia a Valencia’, de Francisco González, Ediciones Carena, mayo 2009, una forma distinta de conocer Valencia y sus alrededores, de disfrutar de la naturaleza y realizarse socialmente.